21/05/12
La ministra de Fomento evita pronunciarse sobre la inexistencia de fondos europeos
- En su reciente visita al lugar de las obras, llegó a afirmar que la decisión de realizar las obras del puerto de
Granadilla por parte de Puertos de Tenerife es una decisión democrática
que representa a la ciudadanía.
- La realidad es que las 56.000 firmas recogidas contra este proyecto, presentadas a través de una ILP en el 2004, ni tan siquiera fueron debatidas en el Parlamento.
- La realidad es que las 56.000 firmas recogidas contra este proyecto, presentadas a través de una ILP en el 2004, ni tan siquiera fueron debatidas en el Parlamento.
En declaraciones a Radio San Borondón, la ministra de Fomento del gobierno del Estado,
Ana Pastor, justificó de este modo tan poco claro y carente de
rigurosidad, la construcción del
puerto de Granadilla con una fuerte inversión de dinero público, pese a
los recortes en Sanidad, Educación y Servicios Sociales que su Gobierno está aplicando para
satisfacer las demandas de los mercados.
Ana Pastor dijo que el puerto de Granadilla se está
construyendo con dinero presupuestado tanto por el Estado, en partidas
consignadas en los presupuestos del año pasado como en las que aún se
tramitan en el Congreso dentro de los PGE 2012, como de los ingresos
propios de la Autoridad Portuaria obtenidos por la actividad portuaria,
organismo que además por razones de ultraperificidad cuenta con fondos
de la Unión Europea.
Cuestionada por la polémica en torno a la consignación de partidas provenientes de la UE para el muelle, la ministra dio un rodeo para evitar contestar que no existen partidas a día de hoy para ese muelle y se limitó a insistir en que los ingresos de los puertos proceden de los distintos fondos a disposición de la Autoridad Portuaria local, cuyo Consejo de Administración administra el presupuesto, asignando las partidas a las obras a través del Plan Director.
Sobre la posibilidad de que el puerto de Granadilla acabe siendo un monumento al despilfarro como lo es el puerto de Arinaga en Gran Canaria pese a tanta inversión de dinero público en una época de crisis como la actual en la que se hacen recortes en los servicios públicos más esenciales, Pastor indicó que la Autoridad Portuaria es un ejemplo de administración en cuanto a democracia, porque en ella están presentes todas las instituciones públicas para tomar las decisiones oportunas sobre las políticas a desarrollar, haciéndolo por tanto de forma plural, por lo que hablamos de decisiones tomadas en representación de los ciudadanos.
En base a lo dicho, afirmó que la decisión de llevar a cabo las obras del puerto de Granadilla por parte de Puertos de Tenerife es una decisión democrática, que cuenta como dijo con el respaldo de las administraciones públicas que en ese organismo están representadas, por lo que no existe discusión sobre legitimidad a la hora de realizar esta inversión pese a la coyuntura económica actual, porque insiste en el argumento de que es una decisión plural, tomada por representantes de un Consejo de Administración que representa a todas las administraciones públicas y, por tanto, tomada en nombre de los ciudadanos a quienes representan.
Cuestionada por la polémica en torno a la consignación de partidas provenientes de la UE para el muelle, la ministra dio un rodeo para evitar contestar que no existen partidas a día de hoy para ese muelle y se limitó a insistir en que los ingresos de los puertos proceden de los distintos fondos a disposición de la Autoridad Portuaria local, cuyo Consejo de Administración administra el presupuesto, asignando las partidas a las obras a través del Plan Director.
Sobre la posibilidad de que el puerto de Granadilla acabe siendo un monumento al despilfarro como lo es el puerto de Arinaga en Gran Canaria pese a tanta inversión de dinero público en una época de crisis como la actual en la que se hacen recortes en los servicios públicos más esenciales, Pastor indicó que la Autoridad Portuaria es un ejemplo de administración en cuanto a democracia, porque en ella están presentes todas las instituciones públicas para tomar las decisiones oportunas sobre las políticas a desarrollar, haciéndolo por tanto de forma plural, por lo que hablamos de decisiones tomadas en representación de los ciudadanos.
En base a lo dicho, afirmó que la decisión de llevar a cabo las obras del puerto de Granadilla por parte de Puertos de Tenerife es una decisión democrática, que cuenta como dijo con el respaldo de las administraciones públicas que en ese organismo están representadas, por lo que no existe discusión sobre legitimidad a la hora de realizar esta inversión pese a la coyuntura económica actual, porque insiste en el argumento de que es una decisión plural, tomada por representantes de un Consejo de Administración que representa a todas las administraciones públicas y, por tanto, tomada en nombre de los ciudadanos a quienes representan.
